miércoles, 11 de julio de 2012

La realización es ahora

Sondeos actuales muestran como estamos frustrados con el mundo y como somos pesimistas sobre el futuro. Se está perdiendo la paciencia con la economía, con sus perspectivas, con sus líderes.

Lo que sucede es esto: Nos estamos dando cuenta que la revolución industrial se esta desvaneciendo. La tendencia de los 80s que llevó cada vez a mayor productividad (y bien remunerados puestos de trabajo) está terminando.

Una cosa es leer sobre los cambios que trajo el internet, otra muy diferente es experimentar esos cambios. Gente que creía que tenía una habilidad valiosa o un título universitario, descubren que ser una persona promedio anónimo no les garantiza un trabajo seguro. Individuos que fueron educados para cumplir y seguir instrucciones descubrieron que ese trato se ha terminado... y no es culpa de ellos, porque ellos siempre hicieron lo que les dijeron.

Esto no es justo obvio. No es justo capacitarse por años, pagar las cuentas, invertir en una casa o en una carrera y de repente, ver como todo se desvanece.

Por un tiempo, los políticos y organizaciones prometieron que las cosas volverán a la normalidad. Esas promesas no son suficientes y es claro para muchos que esta actualidad es la nueva normalidad.

Regularmente escucho a la gente decir, "ya basta con este choro conceptual, dime como hacer que mi empresa avance, mi día de trabajo sea cubierto, mi sueldo restablecido..."  Existe una idea de que de alguna forma, si solo hacemos las cosas con mas esfuerzo o habilidad, podemos regresar a la época de los Brady Bunch y mercados masivos y productos mediocres que pagan la inversión con el paso de los años.  Esto no es una idea, es un mito.

Algunos insisten que si nos enfocamos en los "fundamentos de los negocios" y "volver a los inicios", todo sera como antes. La promesa de que puedes volver a recibir un sueldo muy bueno para hacer precisamente lo que tu jefe te dice hoy en día es un sueño, ya no es una realidad.

Toma mucho tiempo para una generación el adaptarse a un significativo cambio revolucionario. El negocio del periódico, despachos de abogados, agencias de coches, casas productoras, incluso los negocios de TI.... uno por uno, las empresas están siendo puestas de cabeza, y requerirá en nosotros un cambio mas rápido de lo que nos pueda agradar.

No es justo, pero es lo que tenemos. Entre mas pronto nos demos cuenta que el mundo ha cambiado, mas pronto lo podremos aceptar y hacer algo al respecto.
Lamentarse no es una solución.

El próximo blog, la segunda parte - "La oportunidad"

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